A menudo nos encontramos con que el mundo del vino intimida a mucha gente. Nosotros nos hemos propuesto acabar con esta tendencia y descubriros un mundo que es mucho más fácil de lo que parece a simple vista. Por eso, creamos este minicurso online, donde a través de varios artículos iremos analizando varios aspectos del vino y de la cata, para que la próxima vez que os enfrentéis a un nuevo vino, no tenga secretos para vosotros. ¿Estáis preparados?
La Cata:
La cata es la práctica esencial para el conocimiento de los vinos. Catar un vino es volcar los sentidos con el fin de emitir un juicio sobre las sensaciones que nos transmite.
Se trata de someter un vino a nuestros sentidos para llegar a conocer sus características, positivas y negativas, con el fin de expresarlas e identificarlas. Por tanto, el objetivo no es más que analizar las sensaciones que nos produce al degustarlo. Por eso, a pesar de las apariencias, catar es algo sencillo.
No se trata de un área reservada sólo para expertos sumilleres, enólogos e iniciados en la materia, si no que nosotros mismos, en nuestras propias casas, podemos aprovechar cada botella de vino que abrimos y disfrutarlo de una manera diferente, con todos los sentidos bien despiertos para captar todas las sensaciones que el propio vino nos va a transmitir.
Como veis, el conocimiento del vino no es un privilegio sólo al alcance de unos pocos sino que cualquiera con las suficientes ganas puede hacerlo, ya que simplemente se trata de seguir determinados pasos para lograr el objetivo deseado y que la experiencia sea provechosa.
Ahora que ya nos hemos iniciado, en el próximo artículo hablaremos de los diferentes tipos de cata que existen. ¿Sabéis lo que es una cata vertical? ¿Y una horizontal? Descubridlo en el próximo artículo de Aprender y Disfrutar catando.