Como ya hemos visto en otras ocasiones, existen múltiples factores que influyen en el desarrollo del viñedo como pueden ser la localización, la orientación o el vigor así como los diferentes tipos de laboreos. El suelo en el que se asienta el viñedo también va a ser un factor clave y de su estado dependerá en gran medida el comportamiento del mismo.
La tradición, el clima y la investigación han marcado desde siempre las pautas sobre el tipo de laboreo a realizar. Así, históricamente, en la viticultura mediterránea no se permitía el crecimiento de la vegetación espontánea en el suelo para que no compitiese con un recurso escaso en estas zonas como es el agua. En cambio en las zonas más lluviosas era tradición aplicar una gestión mixta, con predominancia de laboreo pero permitiendo que creciese la hierba bajo la viña en las épocas de lluvia.
La aparición de los herbicidas marcó una nueva época y su uso se generalizó para mantener el suelo sin competencia sobre todo debajo de la línea de las plantas y en aquellos viñedos donde la mecanización era prácticamente imposible. A pesar de esta generalización, cabe destacar que en la denominación de origen Rías Baixas ha sido una práctica muy poco empleada, usada tan solo en un 5% de los viñedos.
El cambio de tendencia en la gestión del suelo ha llegado en los últimos años gracias a los diversos estudios e investigaciones realizados en este campo. La preocupación por un mayor respeto al medio ambiente y la búsqueda de la sostenibilidad han desembocado en nuevas estrategias que pasan por el uso de coberturas vegetales en los viñedos. En función de la disponibilidad de agua, de la región, del tipo de suelo y de los objetivos cualitativos perseguidos, éstas pueden ser totales o parciales y permanentes y temporales.
En Bodegas Martín Códax apostamos por el uso en el viñedo de cubiertas vegetales ya que, entre sus múltiples ventajas, ayudan a controlar el vigor de las cepas y mejoran la estructura del suelo favoreciendo el desarrollo de las raíces y evitando la compactación producida por el uso de maquinaria. Además, estas cubiertas permiten la accesibilidad al viñedo en épocas de lluvias, ayudan a manter el nivel de materia orgánica de los suelos y favorece la biodiversidad ya que son refugios de microfauna útil en los ecosistemas agrarios.
Hay que gestionar moi ven porque e un caldo de cultivo para hongos coma o mildiu
Como todo en viticultura as distintas estratexias hai que aplicalas tendo en conta as consecuencias globais sobre o viñedo. En calquera caso o efecto das cubertas sobre o control do vigor axudan a reducir a incidencia de praga. #esenciamartincodax Asinado Miguel Tubío, Director de Viticultura.